Unicas Cosas únicas para tí
Puede verse en ella que el suministro total de energía depende, en primer lugar, del grupo 4 (cereales, leguminosas, patatas, azúcar), seguido del grupo 3 (grasas y aceites). El contenido de proteínas depende también, en primer lugar, del grupo 4, seguido del grupo 2 (carnes, pescados, aves), y en tercer lugar, del grupo 1 (leche y derivados, huevos).
El contenido de grasa total depende en primer lugar del grupo 3 (grasas y aceites) y, en menor proporción} del grupo 1 (leche y derivados, huevos) y del grupo 2 (carnes, aves, pescado).
Cerca de un 90 por ciento de los hidratos de carbono son suministrados por el grupo 4 (cereales, leguminosas, patatas, azúcar). La cantidad total de azúcar (mermelada y azúcar) es de unos 46 g. por día, que corresponden a un 7 por ciento del valor calórico total de la dieta.
Alimentos con alto contenido de carbohidratos
Esta cantidad es algo menos de mitad de la consumida en Estados Unidos. Hace ya años que las autoridades norteamericanas incluyen el azúcar en la lista GRAS o lista de sustancias consideradas inofensivas. Dejando aparte el problema de la caries dental, no demuestra que el azúcar tenga participación alguna en el desarrollo de las enfermedades degenerativas. A menos que el español tenga una especial sensibilidad para el azúcar, cosa que según creo nunca ha sido demostrada, no encuentro justificación alguna para preocuparse por el contenido de azúcar del modelo que estoy analizando.
El contenido en calcio depende en casi dos terceras partes del grupo 1 (leche y derivados) y, en segundo lugar, del grupo 4 (cereales, leguminosas, patatas, etc.). El contenido de hierro depende en primer lugar del grupo 4 y en segundo lugar del grupo de las hortalizas y verduras (grupo 5). La contribución de las carnes no pasa de un 10 por ciento del contenido de hierro total.
El contenido de Vitamina A (en forma de caroteno) depende en casi dos terceras partes del grupo 5 (hortalizas y verduras) y en bastante menor proporción de la leche y derivados y del grupo de grasas y aceites.
La mayor parte de la tiamina procede del grupo de los cereales y leguminosas, mientras que la riboflavina procede principalmente del grupo de la leche y huevos seguido del grupo de los cereales y leguminosas.
La niacina procede en primer lugar de los cereales y leguminosas (grupo 4) y en segundo lugar del grupo de carnes y pescados (grupo 2).
Alimentos
La vitamina C procede en una tercera parte del grupo 4 (específicamente de las patatas) y en una cantidad igual de las hortalizas y verduras, con una contribución ligeramente inferior de las frutas.
Los datos que acabo de exponer deben servir para que el lector pueda darse cuenta de que el ajuste de energía y nutrientes de una dieta es cuestión bastante engorrosa. Debido al diferente valor energético y al distinto contenido de nutrientes esenciales de los alimentos es necesario que la dieta’, como tantas veces he dicho, contenga alimentos representativos de los distintos grupos de géneros alimenticios comúnmente consumidos. Basta con mirar atentamente a la tabla IV para comprender que la eliminación de uno de los grupos de alimentos conduce a una pérdida importante de uno 5 más de los nutrientes esenciales.
Del mismo modo, un aumento desproporcionado de la cantidad de alimentos pertenecientes a uno de los grupos puede alterar significativamente la composición de la dieta total. Suponga el lector, como ejemplo, que queremos aumentar las cantidad de ríboflavina.
Esto puede hacerse fácilmente aumentando la cantidad de leche y de huevos, pero puede dar lugar a una elevación indebida del contenido total de grasa de la dieta. En el modelo de distribución de alimentos que aparece en la tabla II se ha introducido con este objeto una ración de hígado o riñones, que son una excelente fuente de esta vitamina, un día a la semana, en vez de una ración de carne o pescado.
La distribución de alimentos que aparece en la tabla II no es más que un ejemplo de una de las muchas Combinaciones del alimentos comunes capaces de satisfacer las necesidades de energía y nutrientes. Por su contenido de grasa limitado (34 por ciento de la energía total) y su bajo contenido de colesterol, satisface también las recomendaciones actuales, en relación con la prevención de la ateroesclerosis. Pero, permítaseme que insista, no es más que un modelo para orientar al lector. No es, ni pretende ser, la dieta «ideal». .
Por otra parte, la utilización de los alimentos mencionados en forma de platos diversos debe quedar al arbitrio del ama de casa. No es mi intención hacer de esta obra un libro de cocina. Basta seguir las indicaciones que haré al hablar del efecto de la cocción sobre el valor nutritivo de los alimentos, para que el ama de casa pueda preparar comidas perfectamente satisfactorias desde el punto de vista de la nutrición y apreciadas por sus comensales.
